Increíble...pero cierto.

Los Mossos d'Esquadra finalmente han detenido a un hombre por vender hachís a menores en Badalona (Barcelona). Y digo finalmente por que los propios policías dudaban de la seriedad de la nota que habían encontrado. El detenido captaba con unas notas, a modo de folleto publicitario, escritos por él mismo y llenos de faltas de ortografía, que repartía con instrucciones para la venta, incluido un mapa que no tiene desperdicio.El muchachote, Marcos, según explicaba en el folleto ofrecía "droga de la guena" al lado del "tituto".A los Mossos no les costó ninún trabajo dar con el domicilio de este hombre, que pasaba la droga por la reja de la ventana. Yo todavía no salgo de mi asombro, y hasta me cuesta trabajo pensar que pueda ser cierto. Si no llega a ser porque ya lo han detenido, pensaría que es una cámara oculta. Os dejo la nota para que alucineis.

La ciega Justicia...

Esta no es una noticia apta para todos los públicos. No es una noticia agradable, pero desafortunadamente, sucede. Hace unos días, una jueza de Tenerife le quitó la custodia de dos hermanas a su madre porque “supuestamente”, había incumplido el régimen de visitas. Las hijas habían presentado una querella contra el padre por supuestos abusos sexuales y se negaban a quedarse a solas con él. Unas imágenes grabadas por un detective privado contratado por la madre, fueron emitidas días pasados por diversas cadenas de televisión, mostrando el momento donde las niñas forcejean con el padre y la tía, tratando de zafarse de ellos y evitar así ir con él. Desafortunadamente no lo consiguieron y la juez no ha revocado la sentencia. Pero la madre tomó ayer la decisión de interponer contra el padre y la tía de las niñas una denuncia por malos tratos, después de ver las mencionadas imágenes por televisión.
Si alguien podía tener alguna duda sobre la credibilidad de las pequeñas, les diré que un médico forense testificó para la demanda penal de las menores, por lo que al menos, la juez debería, como solicitan las representantes del Foro contra la Violencia de Género, escuchar lo que tienen que decir las niñas.
Es una noticia que me avergüenza, no solo por el hecho en sí, que ya es bastante crudo, sino por la sentencia de la jueza. Me pregunto cómo puede ser posible que un juez tenga la poca conciencia de mandar a dos niñas con evidencias de abusos sexuales a los brazos de su posible agresor. Al menos se debería aclarar la situación antes de tomar una decisión. Desde luego, para mí le deberían expulsar de la carrera judicial. Señores y señoras, que la justicia está para ayudarnos.
Mientras tanto, la madre de las niñas, que ya tiene una tercera hija adoptada, está en fase de una segunda adopción; lo cual, tampoco me parece correcto teniendo en cuenta que aún no se ha demostrado la autoría de las agresiones sexuales.

¡Oiga!, ¿Aquí no tenemos C.S.I?.

El periodista Ignacio González ha publicado hoy una noticia en el ABC que me ha dejado ... perpleja!. Un claro ejemplo de chapuza nacional: Un cadáver ha estado cuatro meses en el depósito del Hospital Valdecilla, en Santander, sin que avisaran a su familia. Lo verdaderamente desastroso es que el difunto tenía el DNI en el bolsillo.
Cuenta González que por delante del cadaver pasaron: la inquilina del piso, médicos del 061, funcionarios de la Policía Local, efectivos del Cuerpo Nacional de Policía, agentes de la Judicial, unidades de la Policía Científica, el juez, el secretario del juez, el forense del Juzgado de Instrucción nº 1. El pobre difunto estaba reconocido, pero por alguna extraña razón, a nadie se le ocurrió darle la mala noticia a la familia. Y eso que sus parientes habían denunciado la desaparición hasta en dos ocasiones y un conato.
El "caso Barquín" se resolvió gracias a la casualidad: cuatro meses después de la desaparición, un primo escuchó una conversación entre varias personas, en la que se comentaba que no sabían qué hacer con el cadáver de un tal Cesáreo que llevaba mucho tiempo sin ser reclamado.
Lo triste es que tras la denuncia de la familia a los Ministerios de justicia e Interior, se desestima la reclamación porque " no se puede apreciar la existencia de irregularidad o mal funcionamiento del servicio". Esto es el colmo. Y si hubiese funcionado mal, ¿qué habría pasado?.
Señores, para resolver un problema es necesario reconocer su existencia. ¿Cómo es posible que las cosa vayan a quedar así? Imagino el dolor de la familia. Cuatro meses buscando a su pariente sin saber si estaba vivo o muerto, y nadie es capaz de decir: perdón, la culpa es mía, o nuestra. Y en lugar de reconocer el error, la justicia concluye que ¿¡no queda demostrado el mal funcionamiento!? No oiga, por aquí no paso. Esto no tiene nada de arte; no me convencen. ¿Y a tí?